Este viaje no ha sido de turismo, sino una inmersión en la vida cotidiana Suiza.
He recordado con mucho cariño experiencias, vivencias, personas…. Y me he dado cuenta de lo importante que es para mi una ciudad como Lausanne.
Mi primer viaje internacional fue a Suiza cuando tenia 13 añitos. En el 83 España estaba mas cerca del tercer mundo que del segundo, así que todo me marcó de tal manera que, empecé a tener curiosidad por los idiomas y por aquello que desconocía, todo lo que fuera diferente y me enriqueciera.
Esa inquietud me llevó a estudiar turismo, a ir a Suiza dos meses a hacer prácticas en una oficina de Turismo y a guardar, de aquella experiencia, un montón de recuerdos que este viaje ha hecho aflorar a la superficie en una extraña mezcla de alegria y melancolia, permitiéndo hacer balance de mi evolución personal en estos últimos 20 años.
Francis (mi primo) me llevó a LA soirée de la noche Ginebrina: el cambio de look de la revista de estilo de vida «Edelweis» en un antiguo palacio aristócrata (al lado del imponente monumento a Calvino) iluminado de magenta y Moet Rosado sin limite….el sitio perfecto para dejarse ver.
Inauguramos un club llamado MILK KLUB, el nuevo templo de la musica Techno con actuaciones en directo, estuve con amigos que no veia desde hace 20 años (que bien y mal nos trata la vida), vimos la Boda Real de Kate y Willy y paseamos por las calles de Lausanne.
La arquitectura de esta ciudad tiene un aspecto retro bellisimo. Es como estar viviendo en plena Belle Epoque con el omnipresente lago Leman allá donde acaban las empinadas calles.
En pleno paseo he recordado cuando en el 90, una noche, subimos a la torre de la catedral de Lausanne a ver a un amigo que trabajaba alli.
¿Alguien trabajando en lo alto de la torre de la catedral?.
En la epoca medieval habia personas que cantaban las horas a los cuatro costados de las torres y ademas vigilaban en caso de ataque o incendio. En francés se llaman Guet.
Fue precioso recordar aquella noche de verano, con Lausanne a mis pies, Evian al otro lado del lago con sus luces tintineantes y de repente una voz grave, fuerte y clara gritando desde cada esquina»c’est le guet….il a sonné once«. Mas tarde supe que Lausanne es la unica ciudad donde este servicio nunca se ha interrumpido desde 1406.
Un amigo me invitó a dar una vuelta por los viñedos aterrazados de las afueras de Lausanne (Lavaux, paisaje patrimonio de la humanidad y Nyon) seguida de una comida que empezó a las 10:30 y acabó a las 18:30 hrs, despues de mucho pisco sour, vino y conversación tratando los temas más variopintos, desde alta relojería hasta los problemas de Suiza desde que entró en el espacio Schengen…..y yo que creía que estas celebraciones solo las sabiamos hacer los mediterraneos!!.
Suiza me ha recordado que es uno de los pocos paises que no entró en crisis y que el Franco Suizo ha salido más que fortalecido, por lo que se ha convertido en el pais mas caro que conozco. Mucho más que Japón.
Y ha sido bonito recordar tambien frases como: «corre….el tren sale en 30 segundos» y asi es.
Tic-tac, tic-tac….hasta pronto Lausanne.
Nene ya me estás traduciendo las frases en francés pues sabes que no entiendo nada de nada. Bueno, lo de Capitale Olympique lo entiendo,jeje
Si quieres traducción, cenita y copita!!!! 🙂